Cómo tener un verano más sostenible

Ha llegado la estación más calurosa del año y, mientras muchas personas comienzan a prepararse para su vacaciones de verano, con viajes a destinos de playa y actividades al aire libre, es importante tener en cuenta que nuestras acciones como turistas tener un impacto significativo en la ambiente. Ser sostenible no sólo nos permite ayudar al planeta, también nos ayuda a disfrutar la temporada de forma responsable. En este artículo, exploraremos algunas formas de mantener un comportamiento más sostenible durante el verano.

Energía

oh uso excesivo de energía Es uno de los problemas más comunes de la estación. En una tentativa de Frío En los espacios en los que nos encontramos acabamos utilizando sistemas de aire acondicionado, ventiladores y similares, lo que conlleva un mayor consumo energético y, en consecuencia, un mayor nivel de emisiones de gases de efecto invernadero, derivados de la producción de energía. Existen ciertos comportamientos individuales que pueden ayudar a minimizar esto, como por ejemplo: ajustar la temperatura del aire acondicionado a un nivel confortable, en lugar de dejarla demasiado baja; cerrar cortinas y persianas para evitar la luz solar directa y así mantener el ambiente más fresco; apagar los dispositivos electrónicos cuando no estén en uso; y, si es posible, opta por lámparas LED de bajo consumo.

Transporte

Para aquellos a quienes les gusta viajar, a menudo el transporte es una parte importante de los planes de viaje. Siempre que sea posible, optar por el transporte público es una excelente opción ecológica frente al alquiler de un coche. Además, si vas a realizar un viaje más corto o a un destino cercano, la bicicleta puede ser una buena alternativa, además de ser más saludable. Si no quieres o puedes renunciar a tu coche, si puedes optar por un vehículo híbrido o eléctrico, ¡ya estás contribuyendo a ayudar al medio ambiente! 

Consumo

¡Es verano, hace calor! EL consumo de alimento y, sobre todo, bebidas, aumenta especialmente durante esta temporada, no solo por las temperaturas, sino también por los momentos que se pasan al aire libre. Dar preferencia a los alimentos orgánicos y de producción local es una de las acciones que puedes realizar para reducir tu impacto ambiental y, al mismo tiempo, apoyar al comercio local. Además, a pesar de que la legislación exige que en este caso haya una gran reducción, evitar los envases desechables también es muy positivo.

Naturaleza

En una temporada en la que disfrutamos más de los espacios al aire libre y de la naturaleza, es fundamental que asumamos la responsabilidad de ayudar a preservar los espacios naturales. No tirar basura al suelo y seguir las normas de conservación es fundamental. Además, determinadas actividades al aire libre son perjudiciales para el medio ambiente, por lo que es importante elegir algo que no provoque un impacto ambiental negativo, como senderismo, piragüismo, ciclismo, etc. 

La conclusión es que, para tener un verano más sostenible y ambientalmente amigable, no es necesario hacer grandes cambios en nuestro estilo de vida; sólo necesitamos adoptarprácticas más conscientes. Pequeñas acciones, como ahorrar energía u optar por el transporte público, no sólo ayudan al planeta, ¡sino también a tu bolsillo!